SIEMPRE NOS QUEDARÁ CESA...
Siempre nos quedará CESA!
Controlled Emergency
Swimming Ascent (CESA-En Inglés) o
Ascenso Controlado de Emergencia Nadando—en Español, es actualmente uno
de los ejercicios y caballo de batalla de la certificación Open Water de PADI.
Curiosamente, agencias como GUE, InnerSpace Explorers o UTD,
con estándares de entrenamientos supuestamente más rigurosos y con reputación
de formar a buenos buceadores, no tienen ningún ejercicio que se asemeje ni en
propósito, ni en ejecución en sus contenidos de entrenamiento. Querrá eso decir
algo?
Hace un par de años, que PADI agregó a sus contenidos
educativos en el entrenamiento Advanced Open Water, el término “Thinker Diver”.
Una política que tiene poco que ver con la habilidad del buceador o capacidades
físicas, y mucho más con la conciencia del buceador bajo el agua. El marco de
trabajo “Thinking like a Diver”, se impulsa los siguientes puntos:
·
Objetivo
primario y secundario de la inmersión
·
Planificación
de la inmersión
·
Conciencia
de la situación
·
La
gestión de la carga al realizar varias tareas a la vez
·
Uso
de buenas prácticas.
Un buceador que aplica
esta filosofía, junto con un sistema de compañeros riguroso, convierte ese
binomio en una estructura muy solida, capaz de enfrentar prácticamente todos
los problemas que puedan surgir bajo el
agua.
Recordemos ahora, cual es el propósito de la CESA: “En una
situación de falta total o casi de gas e donde mi compañero está demasiado
lejos para compartir su gas, inhalo mi último remanente de gas y asciendo a una
velocidad controlada dictada por mi ordenador. En el supuesto de no llevarlo, ascendería
a una velocidad igual o menor que 18m/segundo (Como saberlo? Esa sería otra
cuestión añadida!) Exhalando durante todo el ascenso para evitar la sobre
expansión pulmonar, y manteniendo el regulador en la boca hasta alcanzar la
superficie”.
Bien, si aplicamos la metodología del binomio mencionando
anteriormente, podemos deducir fácilmente que si el manejo del gas es el
adecuado, jamás llegaremos a la situación inaceptable y catastrófica de
quedarnos sin gas y tener que iniciar el ascenso con la última bocanada que nos
queda en la botella. Si en cambio la situación de pérdida de gas, no fuera por
un error nuestro, si no por una fuga en la alta presión por ejemplo, en ese
caso, el compañero entraría en acción donando
La segunda situación es claramente más tranquilizadora y a mi
forma de ver, convierte la CESA en una herramienta prácticamente inútil!Por si aun no estuviéramos convencidos del todo, imaginemos
este escenario: Haciendo Fotosub, desatiendo mi manómetro y me quedo sin gas (1º
error). Actúo con calma y durante una exhalación busco a mi compañero alrededor
mío y veo que está demasiado lejos para alcanzarlo y compartir su gas (2º
error). Decido iniciar la CESA, no tengo más remedio! Cuando me dispongo a
inhalar e iniciar la maniobra, ya no queda más gas porque lo exhalé mientras
buscaba a mi compañero… (3º y quizás último error!). CESA a mi forma de ver, contradice de alguna manera los
pilares básicos del “Thinking like a Diver”.
Dicen los que saben,
que tener un único plan A, hace que pongamos todos nuestros recursos y esfuerzos
en lograrlo, algo que no sucede cuando sabemos de la existencia de un plan
alternativo por si el plan A falla. Bien, nuestro plan A consiste en velar por el
gas, si o si, no hay discusión posible! Pero si fuéramos lo suficiente
negligente para que eso no ocurriera, entonces recurrimos al plan B: CESA. Y si
aun no fuera suficiente, tenemos un Plan C: El ascenso de emergencia. Listo para aplicarlo cuando no tenemos
gas y no estamos seguros de poder
alcanzar la superficie ejecutando un CESA.
Cuantos planes necesitamos para suplir la carencia de una
conciencia basada en la seguridad y buenas prácticas?
Comentarios
Publicar un comentario